La Panna Cotta, según definición de Wikipedia, es un postre italiano que significa "nata cocida". Se suele hacer con nata, azúcar, leche y gelatina. Mi cuñada Julia, que es aún más cocinillas que yo, un día, decidió cambiar la gelatina por cuajada para que no quedase esa textura tan gomosa que le da la gelatina. El invento fue todo un éxito porque consiguió un postre de cuchara suave y ligero con una cremosidad increíble.
Es un postre fácil, rápido, lleva pocos ingredientes y no se tiene que hornear. Es un gran candidato para alguna de mis celebraciones navideñas porque después de una comida o cena copiosa los postres fresquitos de cuchara, se agradecen. ¡Una auténtica delicia!